El efecto de Kuleshov explicado por Alfred Hitchcock

El efecto de Kuleshov fue definido por el pionero ruso del cine Lev Kuleshov, y continua siendo una de las herramientas visuale más poderosas al día de hoy.

El efecto de Kuleshov

El efecto de Kuleshov es quizás una de las técnicas fílmicas más interesantes y escalofriantes alguna vez divisadas, no sólo por su simpleza, sino que además también por su brutal efectividad al punto de, literalmente, ser capaz de manipular la percepción del público sobre un personaje en unos pocos segundos.

Fotografía mostrando el efecto Kuleshov.

La efectividad de ésta técnica fue tal que cautivó a algunos de los mayores innovadores del cine moderno pionero como Alfred Hitchcock, director y escritor interesando en todo tipo de técnicas revolucionarias. Desde películas filmadas en una sola toma, o toma única, hasta efectos psicológicos en el público como la sugestión y el aquí tratado efecto de Kuleshov.

La técnica fue documentada y creada durante la segunda década del siglo XX por el gran Lev Kuleshov. Director del cual cuando digo que fue un grande no exagero, ya que el mismo ha creado filmes legendarios a pesar de su «lado oscuro». Fue de hecho propagandista para la Unión Soviética, y entre obra y obra solía crear filmes de propaganda como «Las extraordinarias aventuras del Sr. West en la Tierra de los Bolcheviques», una de las películas anti-estadounidenses más graciosas alguna vez creadas.

Volviendo al asunto de la técnica, Kuleshov fue un perfeccionista nato, interesado al punto de la obsesión en la respuesta particular del público ante las escenas vistas en sus películas; por lo que pasó incontables horas escabulléndose en las proyecciones de sus obras para así poder observar de cerca y en detalle las reacciones del público.

Fue, entonces, gracias a éstas observaciones que logró notar que bastaba solamente de un astuto juego de imágenes para explotar, por así decirlo, la capacidad del ser humano para «llenar los faltantes» a partir de asociar unas pocas piezas de información unas con otras.

Con ésto en mente, comenzó entonces a desarrollar fotomontajes que lograban darle una característica, que podía ser tanto buena como mala, al protagonista a partir de asociar su imagen con otras imágenes dejando al público que se convenciese a si mismo sobre la relación entre las mismas.

El fotomontaje: aunque es difícil de imaginar, las técnicas de fotomontaje son casi tan antiguas como el cine en si mismo. Una de las primeras películas en la Historia que aun se conserva se grabó en el año 1888, y ya en el año 1898, es decir, unos 10 años después, los grandes pioneros del cine, George Albert Smith Sr. y Georges Méliès, filmaron la primer película navideña en la Historia utilizando técnicas de fotomontaje para los efectos especiales.

Para demostrar ésto contrata al popular actor mudo Ivan Mozzhukhin, a quien filma de manera espartana para luego crear un fotomontaje de su rostro asociándolo con distintas escenas que iban desde el ataúd de una niña hasta un plato de sopa.

Tras la proyección, Kuleshov consultaba entre los espectadores cuáles eran sus opiniones sobre la calidad de interpretación del actor, y prácticamente todos los presentes le respondían que efectivamente lograba desplegar en pantalla emociones de dolor, hambre y hasta incluso felicidad. Cuando en realidad, lo que no sabían, es que siempre se utilizaba la misma toma del rostro del actor para todas las escenas.

El efecto de Kuleshov y la propaganda política

Si bien oficiales del Partido Comunista durante el régimen de Stalin prohibirían el cine de fotomontaje calificándolo de peligroso y hasta incluso de atentar contra la naturaleza misma del Realismo socialista -corriente estética muy popular tanto en la Rusia de Stalin como en la China de Mao-. Algo que también pensaron décadas más tarde sobre la genética y la cibernética, y que tuvo un efecto devastador en su desarrollo científico.

Dicho lo anterior, es irónico quizás que el efecto de Kuleshov continuó y continua -quizás ahora más que nunca- siendo utilizado en filmes de propaganda e incluso cine de entretenimiento como herramienta útil para moldear a priori la percepción del público sobre el protagonista.

Alfred Hitchcock

Como mencionamos al principio de este artículo Alfred Hitchcock se interesó en gran medida en experimentar y adaptar ésta técnica a su obra, razón por la cual la utilizó en varias de sus películas. El mítico maestro del horror y suspenso la vio tan efectiva y útil que incluso produjo material instructivo como el que veremos a continuación intentando explicar su uso.

Fotografía de Alfred Hitchcock y el efecto de Kuleshov.
Alguien que supo utilizar el efecto a la perfección fue el legendario Alfred Hitchcock, quien de hecho creó un corto explicando a sus espectadores en qué consistía y cómo se utilizaba dicha técnica. Un abuelo disfrutando ver a una madre jugando con su bebé, o un anciano degenerado deseando a una mujer en bikini.

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