Magnitogorsk, la gigantesca fábrica militar que ganó la Segunda guerra

Magnitogorsk es un parque industrial construido sobre una montaña de hierro, Magnitika. Gracias a este la Unión Soviética ganó la guerra.

Las montañas magnéticas

Al sur de los Urales existía una formación geológica única en el planeta: Magnitka una montaña con una de las concentraciones de hierro más altas del planeta tierra. En efecto, su nombre, Magnitika, provenía del magnetismo natural hallado en las cercanías de la montaña y el efecto que este tenía en los compases y brújulas de los viajeros y exploradores. Necesitado de acero para fomentar su maquinaria bélica Stalin y construir miles de tanques, piezas de artillería e incluso una red monumental de trenes, mandó a fundar la ciudad industrial de Magnitogorsk, un verdadero y colosal monstruo industrial y gigantesco complejo minero el cual en menos de una década llegó a desmontar la montaña entera.

El Magnitogorsk

Este complejo minero es considerado como la construcción más grande (en extensión y escala) de todos los tiempos y fue construido utilizando principalmente con trabajo esclavo de miles de prisioneros políticos y el conocimiento técnico que aportaban los ingenieros soviéticos. Con el tiempo Magnitogorsk se volvió en el parque industrial más grande la Unión Soviética, con una capacidad de producción sin igual.

Tras terminarse la construcción se alzó una planta industrial-minera y una ciudad capaz de albergar a 450 mil trabajadores. No obstante, esto se logró a un alto precio, ya que al terminarse unos 30 mil obreros habían perdido sus vidas a causa de la gran cantidad de accidentes laborales causados por lo acelerado de la construcción -secundando solo a la cantidad de muertes en las construcciones de la Muralla China y de las Pirámides de Egipto (cuyos métodos de construcción sin maquinarias pesadas han sido recientemente descubiertos y explicados por un ingeniero mecánico)-.

Las chimeneas de Magnitogorsk.
Las chimeneas de Magnitogorsk.

La razón por la cual se construyó de manera tan frenética es muy simple. La Unión Soviética venía a Magnitogorsk como la solución a muchos de sus problemas industriales. El suministro de hierro era amplio y casi interminable, y la zona estaba alejada de cualquier frontera, en pleno corazón del territorio soviético.

La producción de acero no comenzó sino hasta 1934. Si bien el complejo había llevado una cantidad de trabajo colosal, el esfuerzo bélico de la segunda guerra mundial llevó a que Magnitka fuera completamente desmontada en menos de una década, colapsando enteramente la economía de Magnitogorsk tras la caída de la Unión Soviética. No obstante, incluso al día de hoy se mantiene como un formidable parque industrial. Gracias a la gigantesca red de trenes de la Unión Soviética, todo lo producido en Magnitogorsk podía ser transportado rápidamente a los distintos frentes de batalla.

Los inclementes gulags: muchos de estos grandes centros industriales soviéticos eran gigantescas prisiones que empleaban la mano de obra de prisioneros políticos, es decir, se trataba de inclementes gulags.

Si bien todo lo anterior parece extremo, debemos entender que este parque industrial y colosal complejo minero le permitió a la Unión Soviética ganar la Segunda guerra mundial. En efecto, desde Magnitogorsk se construyó la gran mayoría de los emblemáticos tanques T-34, los tanques de guerra con los cuales los soviéticos arrasaron a los alemanes y ganaron territorio tras territorios.

En efecto, la mayoría de los historiadores pone a Magnitogorsk como una de las razones principales por las cuales la unión soviética ganó la guerra en el frente del este. Sin este complejo minero e industrial hubiese sido imposible suministrar al ejército soviético con los cientos de miles de toneladas de material bélico necesitadas diariamente debido a los intensos y continuados combates. Por ejemplo, la gran mayoría del material de artillería soviético utilizado en las batallas del Dniéper y Kursk, provino de este parque industrial

Hoy en día la antigua región de la desaparecida montaña de hierro de Magnitka, más allá de su particular historia, también es una rareza visual, ya que vista desde el aire aparenta un circuito integrado como los encontrados en los ordenadores. Desafortunadamente y víctima de su rareza geológica Magnitogorsk es una de las regiones peor contaminadas del mundo.

Fotografía de un colosal monumento de dos hombres sosteniendo una espada gigante.
Monumento de Magnitogorsk a los trabajadores de la industria bélica de la Unión Soviética.