
La campaña anti-suicidios más rara de la historia: forzar a sonreír
Debido a la ola de suicidios en Hungría, las autoridades tuvieron una extraña idea para solucionar el problema. Forzar a la gente a sonreír.
Revista y recopilación de artículos relacionados a las varias curiosidades y fenómenos aombrosos y maravillosos que nos sorprenden día a día.
Debido a la ola de suicidios en Hungría, las autoridades tuvieron una extraña idea para solucionar el problema. Forzar a la gente a sonreír.
Si bien la población de Corea del Norte padece los efectos de las sanciones impuestas por los Estados Unidos, la élite norcoreana vive de manera lujosa.
Namie, la ciudad cercana a la planta nuclear de Fukushima, se convirtió en una ciudad fantasma tras la tragedia. Hoy la podemos recorrer de manera virtual.
Danakil es uno de los lugares más extremos del planeta. No solo por sus temperaturas y lagos de azufre, sino también por sus violentos piratas.
En Mozambique, en la sabana africana, existe un grupo de cazadores de la sabana que han entrenado monos para montar jabalíes y dirigirlos hacia sus redes.
Al aparecer los primeros chalecos antibalas la gente creyó que se trataba de un truco. Para demostrar que eran reales, se utilizaron personas como prueba.
En el siglo XX dos hombre revolucionarían la arquitectura y el diseó industrial. Le Corbusier y Henry Dreyfuss, los padres de la antropometría.
Si bien el monte Everest es la montaña más alta del planeta, debido a la forma terrestre el punto más cercano al espacio es la cima del volcán Chimborazo.
En el pueblo de Pripyat, cercano a la planta nuclear de Chernobyl hay un parque de diversiones abandonado. Varios aventureros trepan actualmente sus juegos.
En Japón existe una fascinante disciplina de grupo denominada caminata sincronizada, en la cual docenas de personas caminan y se cruzan en sincronía.
El piloto de carreras Kenny Bräck pasó a la historia por ser el único ser humano que sobrevivió sin secuelas graves a una desaceleración de 214g.
Los moriori fueron una tribu que creía en la paz total y el entendimiento, negándose a luchar. Desafortunadamente los maoríes destruyeron su tribu tras una sangrienta invasión.
El interior de los submarinos de la primera guerra era realmente una maraña de controles, cables, válvulas y palancas a causa de la limitada la tecnología de la época.