En el pueblo de Pripyat, cercano a la planta nuclear de Chernobyl hay un parque de diversiones abandonado. Varios aventureros trepan actualmente sus juegos.
En 1991 varios años después de la catástrofe de Chernobyl un grupo de valientes investigadores ingresó interior de Chernobyl y llegar hasta el reactor.
Los poderes de la Guerra Fría construyeron gigantescos espías electrónicos para analizar al enemigo. Duga-3, el pájaro carpintero soviético, fue la antena más misteriosa de la Guerra Fría.
El Experimento Orenburg fue una prueba nuclear de la Unión Soviética utilizando soldados que avanzaban hacia el hongo nuclear y un poblado entero expuesto a la radiación.