Tom Attridge fue un piloto que en el año 1956, tras una vertiginosa maniobra a gran velocidad, hizo que sus propias balas impacten contra su avión, derribándose a sí mismo.
Los poderes de la Guerra Fría construyeron gigantescos espías electrónicos para analizar al enemigo. Duga-3, el pájaro carpintero soviético, fue la antena más misteriosa de la Guerra Fría.
A finales de la década del cincuenta la Ford Motor Company, inspirada en los avances tecnológicos, intentó construir un automóvil nuclear: el Ford Nucleon.
Uno de los mayores enigmas de la historia es dilucidar quiénes fueron los primeros escaladores en llegar a la cima del Everest. Increíblemente, todavía hay dudas sobre quienes en verdad fueron los primeros en llegar.
Varios científicos y grupos de aventureros internacionales han intentado enviar una cámara al punto más profundo del océano, el increíble Punto Challenger.