La máscara hueca, la ilusión que no puede ser vista por esquizofrénicos

La máscara hueca es una ilusión óptica que, según el investigador Jonathan Roiser del UCL, no puede ser vista por pacientes esquizofrénicos.

La máscara hueca

La ilusión de la máscara hueca es un fenómeno o ilusión óptica muy antigua que siempre se ha mantenido popular. No obstante, las mismas se han vuelto de mucho interés cuando un equipo de investigadores liderados por el doctor Jonathan Roiser del University College London descubrió que los pacientes que sufren de esquizofrenia son incapaces de ver la ilusión.

La capacidad del cerebro humano para reconocer rostros: la forma del rostro humano es uno de los patrones que más fácilmente reconoce el ser humano, de hecho, hemos evolucionado para reconocer rostros muy fácilmente. Debido a esto, el cerebro a veces «reconoce rostros» en objetos inanimados, este efecto se denomina paraedolia.

La misma ocurre cuando una máscara, que tiene un sector cóncavo y otro convexo, es rotada sobre su eje. El cerebro humano, entonces, es incapaz de procesar un rostro como algo cóncavo, debido a la importancia que ha tenido a nivel evolutivo el reconocimiento facial y la gran cantidad de sectores y mecanismos del cerebro orientados a dicha tarea, por lo que, al rotar la máscara y pasar del lado cóncavo al convexo, el cerebro simplemente procesa el lado convexo como si se tratase de un lado cóncavo, viendo efectivamente dos rostros normales.

Un bloque de máscara hueca utilizado para distintas experimentaciones.
Un bloque de máscara hueca utilizado para distintas experimentaciones.

Si bien existen muchas variaciones del experimento, incluidas ciertas máscaras huecas donde el interior cóncavo es pintado y sombreado para que, incluso las personas que no sufren de esquizofrenia puedan ver a la máscara como un rostro normal, la versión clásica o estándar del experimento de la máscara hueca debe hacerse completamente monocolor, generalmente con un rostro color marfil y con una iluminación tenue que no acentúe de manera drástica las diferencias en elevación en las facciones tanto de la máscara cóncava como de la máscara convexa (es decir, la máscara que sobresale fuera del bloque).

El experimento del Dr. Roiser

Las personas que sufren de esquizofrenia padecen comúnmente de grandes dificultades para interpretar las emociones ajenas, y éste estudio realizado por el Dr. Roiser efectivamente ha probado que dichas dificultades pueden estar relacionadas a una manera diferente de procesar los rostros en el cerebro esquizofrénico.

En el mismo, los pacientes sin esquizofrenia simplemente ignoraban subconscientemente las pistas visuales del rostro cóncavo y veían al mismo como un rostro convexo, ya que sus cerebros respondían a varios patrones de reconocimiento facial, mientras que las personas con esquizofrenia vean al rostro cóncavo correctamente, como algo hundido.

Otras ilusiones ópticas con rostros: como mencionamos anteriormente el cerebro humano tiene una capacidad muy desarrollada para reconocer rostros humanos, debido a esto hay una gran cantidad de ilusiones ópticas relacionadas con el rostro, como por ejemplo la ilusión del lado dominante de nuestro rostro.